La Nueva Medicina Germánica, desarrollada por el Dr. Ryke Geerd Hamer, sostiene que las enfermedades del riñón se originan a partir de un conflicto biológico relacionado con la falta de líquido en el cuerpo. Según esta teoría, los riñones actúan como reguladores del equilibrio hídrico en el organismo y su mal funcionamiento puede deberse a una percepción subjetiva de falta de líquido en el cuerpo.

En términos emocionales, la Nueva Medicina Germánica plantea que la emoción detrás de las enfermedades del riñón está relacionada con un sentimiento de separación o desconexión emocional. Esta desconexión puede ser tanto interna, como una desconexión de uno mismo y de sus emociones, como externa, como una desconexión de los demás y del mundo que nos rodea.

El conflicto biológico específico que desencadena la enfermedad del riñón puede variar de persona a persona. Por ejemplo, alguien que experimenta una sensación de soledad profunda y duradera puede desarrollar una enfermedad renal debido a que su cuerpo interpreta que necesita conservar más agua para sobrevivir en una situación de escasez emocional. Otras personas pueden desarrollar problemas renales después de experimentar una fuerte pérdida emocional, como la muerte de un ser querido.

Esta teoría ofrece una perspectiva interesante sobre el vínculo entre la mente y el cuerpo y cómo las emociones pueden influir en nuestra salud física. Además, promueve la idea de que es importante abordar las causas emocionales subyacentes de las enfermedades, no solo sus síntomas físicos.